En estos días de enero, nos hemos centrado en el secado tradicional de la chufa que utilizamos para nuestra horchata. Esta etapa, que sigue a la recolección de la chufa, es clave para asegurar que el producto final mantenga su sabor y calidad únicos. Durante un mínimo de dos meses, nos dedicamos a girar y secar cuidadosamente las chufas hasta que alcanzan un nivel de humedad del 11%, momento en que ya podemos ensacarlas y almacenarlas para su posterior uso.
El proceso de secado es muy delicado y debe realizarse de manera uniforme. A lo largo del invierno, nos aseguramos de abrir o cerrar las ventanas dependiendo de la humedad ambiental. En días de poca ventilación, utilizamos ventiladores para forzar las corrientes de aire, garantizando que el secado sea óptimo y constante.
Hoy, no solo estamos emocionados por seguir ofreciendo nuestra horchata con el sabor y la tradición que nos caracteriza, sino que también estamos estrenando nuestra nueva página web. En ella, podrás conocer más sobre el proceso artesanal que seguimos, nuestros productos y, por supuesto, disfrutar de la experiencia única que es tomar una horchata Subies.
Gracias por ser parte de nuestra historia y por acompañarnos en este viaje lleno de sabor, tradición y pasión. ¡Bienvenidos a nuestra nueva web!