La horchata es mucho más que una bebida refrescante; es el resultado de un proceso artesanal que ha sido perfeccionado a lo largo de generaciones. En Subies, cada paso del proceso de elaboración está lleno de dedicación, tradición y pasión por ofrecer un producto único que resalta el sabor auténtico de la chufa. Hoy te contamos cómo preparamos nuestra horchata desde el principio hasta el final.
1. Recolección de la Chufa: La Base de Todo
El proceso comienza en el campo, con la recolección de la chufa, un tubérculo pequeño pero lleno de sabor y propiedades nutritivas. En Subies, trabajamos con agricultores locales que cultivan la chufa de manera sostenible, respetando los tiempos de crecimiento y garantizando que solo cosechamos las mejores. La calidad de la chufa es fundamental, ya que será la base de nuestra horchata.
2. El Secado: Tradición y Paciencia
Una vez recolectadas, las chufas se someten a un proceso de secado tradicional que puede durar hasta dos meses. Durante este tiempo, las chufas se giran y se secan de forma natural, controlando la humedad para alcanzar el 11%. Este paso es crucial para conseguir la textura y el sabor que hacen que nuestra horchata sea tan especial. En los días más fríos de invierno, abrimos o cerramos las ventanas para regular la humedad, y en días sin viento, usamos ventiladores para forzar el flujo de aire.
3. La Limpieza y Triturado: Preparación para la Mezcla
Una vez secas, las chufas se limpian meticulosamente para eliminar cualquier impureza. Después, se trituran con cuidado para liberar su almidón y sabor. Es en este paso donde comenzamos a notar el aroma y la textura de lo que será nuestra horchata. Las chufas trituradas se convierten en una pasta que será la base para la mezcla.
4. La Mezcla: El Secreto de una Horchata Suave y Delicada
La pasta de chufa triturada se mezcla con agua fresca y azúcar, siguiendo una receta tradicional que ha sido perfeccionada en Subies a lo largo de los años. La proporción exacta de estos ingredientes es lo que marca la diferencia entre una horchata común y una horchata de calidad. La mezcla se deja reposar durante un tiempo para que los sabores se integren de forma armoniosa.
5. El Filtrado: El Toque Final de Pureza
Una vez que la mezcla está lista, se filtra para eliminar cualquier resto sólido, dejando solo el líquido suave y cremoso que caracteriza a nuestra horchata. Este filtrado es fundamental para asegurar que la horchata sea ligera, deliciosa y perfectamente equilibrada en sabor.
6. Enfriado y Embotellado: El Momento de Disfrutar
Finalmente, la horchata se enfría a la temperatura ideal y se embotella para su distribución. En Subies, nos aseguramos de que cada botella mantenga la frescura y la calidad del producto, para que puedas disfrutar de una horchata auténtica, tal y como la hacían nuestros antepasados.
La Tradición Sigue Viva en Cada Sorbo
El proceso de hacer horchata en Subies es un viaje que involucra paciencia, dedicación y el compromiso de ofrecer lo mejor a nuestros clientes. Cada paso está pensado para mantener la autenticidad y el sabor único que nos define. Nos enorgullece seguir una tradición que ha sido transmitida de generación en generación, y queremos compartirla contigo en cada botella de horchata que elaboramos.